EL TIEMPO


martes, 12 de enero de 2016

ALMUERZO DE NAVIDAD 2015

Como viene siendo tradicional, el equipo celebra por Navidad un almuerzo de convivencia que ayuda a estrechar los lazos de unión entre sus componentes y a ampliar el círculo de conocidos/as, así como la capacidad de ingesta de toda clase de elementos orgánicos que nos da la madre Naturaleza.
En esta ocasión, el almuerzo se celebró el pasado 19 de diciembre en la Bodega Obregón, sancta sanctorum de nuestro club, por donde han pasado algunos de los momentos más memorables de los últimos años, que por supuesto no han sido los deportivos.

Hasta las instalaciones de Manolo González en la calle Zarza se desplazaron nuestros jugadores, algunos de ellos pletóricos tras la Misión en El Colorado, de grato recuerdo aún en sus retinas y en sus estómagos. En Obregón pudimos degustar una vez más gran parte de su amplio menú, comenzando por el Fino La Draga y terminando por el cacao y el brandy de la casa, a cual mejor. Entre copa y copa, por supuesto probamos ese Pedro Ximénez con trozos de pollo y otros platos típicos del lugar como el ajo caliente al oloroso o el menudo al amontillado. De postre, unos magníficos, exquisitos, pestiños al anís para chuparse los dedos.

Naturalmente, después de comer había que tomarse una copa y en esta ocasión decidimos enfilar la dirección del Centro Comercial de Vistahermosa, donde Matías y Jaime le habían echado el ojo a una zambomba, o más bien a lo que giraba en torno a ella. No se equivocaron nuestros sabios guías, pues en una de las plazas del citado centro pudimos disfrutar de un gran ambiente navideño, con la ventaja de tener a mano media docena de pubs sin tener que desplazarnos más de cinco metros a pie. Uno de los momentazos de la jornada fue el baile que perpetró Jaime, quien osadamente se marcó unos pasos con gracia y salero salsero en la rumba que interpretó el conjunto en plena plaza.

La jornada concluyó en otras zonas de este recinto lúdico, con una romería de jugadores de pub en pub y tiro porque me toca, al son de los villancicos blues tan famosos como 'Madre, en la puerta del Club hay un niño', '25 con premio fun, fun, fun', 'Pero mira cómo beben los men in blue', 'Noche de Pádel', 'El pequeño pastorcito chumito', 'El tan barrilero' o 'Saca la bota, Mariano, que nos vamos a emborrachar'.


Nuestro capitán, Javi, dio por inaugurado el almuerzo con un discurso muy emotivo que hizo llorar a Miguel Ángel, a su derecha, ya que en uno de los momentos se refirió a las dificultades de las colonias de ánsares que emigran a climas más cálidos en invierno, confundidas este año por las altas temperaturas registradas en la península. Al fondo se puede leer en la dedicatoria de una de las botas: "A la Bodega Obregón, en reconocimiento a su gran labor en favor del deporte del pádel, donde comenzó a forjarse mi leyenda. Firmado: Fernando Belasteguín".


Manolo, propietario de la Bodega, no quiso dejar de acompañarnos una vez más en nuestros encuentros. En la imagen se le puede ver a la izquierda sentado junto a Luis, Josemi, Jaime, Miguel Ángel, Javi y Matías. "Los Men in Blue tienen aquí su casa, pero por favor, que nadie se quede dormido otra vez dentro de una bota, que luego hay que desinsectarla", comentó.



Ya en el centro comercial, Miguel Ángel, Luis y Javi se percatan de que algo está pasando en una de las plazas. Un soniquete les lleva hasta el lugar... 


Josemi también se da cuenta de ello, mientras Matías le dice algo a Jaime, que no se lo piensa dos veces y sale a bailar...


Para ver el video, pinchar sobre el Play de la imagen.


Jaime estaba muy activo y después del baile decidió meterse a pinche de cocina en una de las barras de uno de los pubs, donde preparó unos magníficos pinchos morunos al Ron Abuelo, como se puede apreciar en algunos de los vasos.


En la penumbra de uno de los pubs, Miguel Ángel meditó seriamente sobre las consecuencias de su incorporación este año a los Men in Blue, que ha cambiado radicalmente su vida hasta convertirlo en un hombre de provecho.

Javi quiso rendir un sincero homenaje a Fofito, al cumplirse 43 años desde que el conocido payaso hiciese la mili en El Ferrol. Nuestro capitán no paraba de preguntar: "¿Cómo echtán uchtedeeeech...?" A lo que sus jugadores respondían sin dudarlo: "Estamo der carahooooo..."


Nuestro agradecimiento a Obregón por exponerse una vez más a nuestras visitas, que no están cubiertas por el seguro de responsabilidad civil de la bodega portuense.



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