EL TIEMPO


domingo, 3 de junio de 2012

CUARTOS DE FINAL









Dicho y hecho. Con apenas una hora de descanso, volvimos a las pistas del Club Bahía de Cádiz de Rota a las cinco de la tarde, ahora con un sol de justicia. Enfrente, el poderoso Club de Pádel Duna del Águila, con toda su artillería, fresco, sin haber jugado antes y habiendo almorzado como Dios manda. Tal vez el encuentro más difícil de los hasta ahora disputados y lo hacíamos sin la presencia de hombres fijos en nuestra alineación como Pepe Portillo (de visita en Ganímedes) y Tomi Contreras, fuera de la provincia, y sin Antonio Jurado ‘Coronil’, que no pudo disputar el partido vespertino porque acudió a una plantación benéfica de cebollinos. Nuestro capitán, Javier Fernández, hizo encaje de bolillos para reunir a diez hombres, que al final dieron la cara pero cayeron por 3-2 que en otras circunstancias habría sido diferente.
Con todo, mantuvimos el tipo con dignidad y dejamos muy clara nuestra candidatura a seguir dando guerra en la próxima Liga de Pádel, ahora desde la Tercera División.

El balance final de la temporada no ha podido ser más satisfactorio: en nuestra primera intervención en esta competición hemos conseguido nuestro objetivo, que no era otro que alcanzar la Tercera División, comenzando desde la Quinta División hace bien poco, el pasado invierno. En un tiempo récord, hemos demostrado que Las Redes cuenta con un plantel, una organización y un ambiente a tener muy en cuenta, y estamos seguros de que irá a más en el futuro.
Enhorabuena a todos los jugadores que han participado en esta Liga y han llevado a nuestro Club hasta cotas importantes del pádel provincial, desde la sencillez, la humildad, el buen ambiente y el buen humor.

Gracias a todos los jugadores de los equipos rivales por su talante y compañerismo, así como a todas las personas que nos han apoyado en esta primera singladura, desde nuestros familiares, amigos, socios y colaboradores, y por supuesto a nuestros patrocinadores, Primitivo Catering, Ron Abuelo y Manzanilla ‘La Guita’, sin los cuales no podríamos haber logrado estas metas.
Javier Sánchez Palencia y Lolo Sibila solventaron un partido trámite en pocos minutos, sin dar opción alguna a sus rivales. Nuestra pareja, inédita hasta ese momento, demostró gran solidez.

David Páez y Carlos Ramírez, a pesar del alto nivel de sus rivales, mantuvieron el tipo y firmaron un correoso 6-4 y 6-4 en contra que lo dice todo.


Juan Antonio Lozano y Rafa Navas, a pesar de enfrentarse a la probablemente pareja más complicada de Duna del Águila (otra vez comando suicida o misión a lo bonzo), que tiene una enorme calidad, no lo pusieron fácil. El resultado, 6-4 y 6-2. Para seguir soñando.
Josemi Gilabert y Jaime Estévez, fieles a su estilo, no dejaron escapar sus puntos y derrotaron sin miramientos a su pareja, si bien el resultado final no cayó esta vez de nuestro lado. Nótese que Jaime iba vestido esta vez de jugador y árbitro a la vez.

Javier Fernández y Paco García dieron todo de sí mismos pero finalmente fueron superados por sus rivales, muy duros, por 3-6, 7-5 y 3-6, un resultado que nos dejaba fuera de semifinales pero que no empañaba en absoluto la excelente campaña del equipo, que entraba por la puerta grande en la división de bronce del pádel provincial al primer intento.

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