EL TIEMPO


miércoles, 25 de diciembre de 2013

PACHANGA DE NAVIDAD DE LOS 'MEN IN BLUE'

El domingo 22 de diciembre, mientras los niños del colegio de San Ildefonso cantaban los números de la Lotería de Navidad, los 'Men in Blue' tentaban a la suerte con una pachanga de alto riesgo debido a las fechas en las que se celebró.
Jugar al pádel en medio de días de tanta ligereza y relajación gastronómica tiene sus peligros y bien que lo sabían quienes respondieron, insensatamente, a la llamada del capitán Javi, que pudo comprobar 'in situ' e 'in vitro' los estragos que pueden causar determinados alimentos en la forma física de sus jugadores.
Con todo, Javi pudo reunir a siete de sus hombres (es un decir) para la pachanga previa a la celebración de la Navidad, sin necesidad de recurrir a la fuerza pública, el chantaje o la extorsión.
Algunos jugadores llegaron a la cancha casi por casualidad porque pasaban por allí, sin recordar siquiera que el día anterior habían confirmado su asistencia. Otros, como Josemi, optaron por la prudencia y no participar, sabedores de que su paso por la pista en las condiciones actuales habría supuesto el fin de sus carreras.
El objetivo de la pachanga no era otro que comprobar el estado físico de los 'Men in Blue' de cara a los próximos compromisos y probar nuevas bebidas existentes en el mercado. Y el resultado no pudo ser más demoledor: sobran saraos y falta ejercicio. Así que Javi se puso pronto manos a la obra y, sólo con ver el rostro y los diámetros abdominales de sus pupilos, los sometió a una concienzuda sesión de trabajo físico consistente en primer lugar en correr dando vueltas a la urbanización, desde el Club hasta El Águila. Seis de los siete jugadores azulinos tuvieron que regresar en taxi, menos uno, que no sabía cómo llegar hasta la urbanización anexa, se perdió y acabó en Cantarranas.
Posteriormente, antes de los partidos, el capitán sometió a un test psicotécnico a los jugadores, comenzando con preguntas fáciles como "cuántas bolas tiene un bote de bolas de pádel" o "trata de tocarte la punta del pie con la mano mientras dices 'tengo los huevos como el caballo de Espartero'". Sólo dos jugadores acertaron la primera pregunta, y porque miraron el contenido del bote de bolas. El resto, al coger el bote, se lo llevó a la boca haciendo el intento de beber como si fuese un vaso de tubo.
A la segunda pregunta del test, todos cayeron. Ninguno se pudo tocar, por supuesto, la punta del pie con la mano. Y cuando dijeron aquello de "...los huevos de Espartero", Javi les contestó con firmeza: "Po... atríncame el cavero".
Bien. Después de esta demostración de bajo estado físico y mental, llegaron los partidos. El sorteo efectuado por la mano inocente, blanca y pura de Miguel 'Bufa' deparó emparejamientos dispares que a su vez depararon encuentros de tres contra uno, de cuatro contra tres y de seis contra dos. Un dislate que estaba apuntando directamente al fin de la pachanga (Bufa pidió disculpas porque se confundió de bolas en el sorteo y creía que estaba jugando al bingo) para dar paso a la visita a Primitiveland, el parque temático favorito de los 'Men in Blue', que cuentan con pulsera y 'fast pass' para no perderse una atracción.

Eso es lo que vamos a contar ahora, eso sí, con la correspondiente galería de imágenes, que hablan por sí solas. Es lo que tiene el tiempo de Navidad, que pasan estas cosas...


Jaime abandona apresuradamente las instalaciones del coliseo redeño tras una nueva actuación protagonizada por el abuso de los pestiños y los pesticidas. Su trote ligero, apuntando a los vestuarios, mostraba a las claras la necesidad de una rápida evacuación.


Carlos cuajó una gran actuación, eso sí, gracias a un misterioso bebedizo que escondía en su bolsa y que conoceríamos más tarde...


David trató de ocultar su rostro a las cámaras en esta ocasión, ya que estaba a punto de protagonizar una acción clandestina, más propia de la yihad padelística que de un hombre de leyes.


Javi, visiblemente preocupado por todo lo que estaba sucediendo esa mañana, miraba al suelo tal vez pensando "¿qué habré hecho yo para merecer a estos tíos...?" 


Pipe, de nuevo una de las estrellas de la mañana cual lucero del alba, acudió a la fuente de agua "pero sólo para mojarme los labios", aclaró como diría cualquier Ortega Cano. Nótese cómo con la mano izquierda sujeta la pared de la pista, que amenazaba desprendimientos de caliches.


Finalizado el partido y camino del tercer tiempo, David simula hacer ejercicios de postcalentamiento, en una posición realmente comprometida.




Carlos decide seguirle el juego y procede a realizar también unos ejercicios, en este caso usando la postura de la garza o del flamenco rosado de Florida, muy útil para enseñar zoología a los más pequeños.




David continúa simulando estiramientos, esperando a que se marche el resto de compañeros del equipo. 


Y, cuando eso sucede, ahí lo tienen. De repente, como si estuviese poseído, el barbudo jugador azulino comienza a mover las mallas de la pista, salvajemente, al grito de "¡así aprenderás a no desviar más las bolas!" y otras frases que por su fuerte contenido omitimos.


Con saña y fuerza, David continúa con su acto vandálico agitando los tubos que sujetan el cerramiento de las pistas.


En esta otra toma se observa cómo el desaprensivo jugador aprovecha su salvaje atentado para pisar con el pie izquierdo a una pobre araña, a fin de evitar que haya testigos de los hechos.


Tras lo sucedido, David se marchó apresuradamente, pero no a las duchas, donde estaba Jaime, sino fuera del Club, sin saber que su intifada personal había sido recogida por las cámaras de nuestro blog.


Y mientras, en el tercer tiempo...


Javi daba ejemplo llegando el primero a fin de empezar pronto a olvidar lo que había visto esa mañana. La flor de Pascua en el rincón favorito de nuestros jugadores en el restaurante del Club dio cierto aire navideño al encuentro. 

Jaime, ya duchado, repuso fuerzas tomando una cerveza y mirando fijamente a Fernando para transmitirle telepáticamente que le fuera poniendo otra. 


Carlos conversa con Javi para explicarle que la cerveza no es el remedio más eficaz para mejorar el juego de los 'Men in Blue', que él tiene la solución definitiva:


¡El vino alemán de Navidad! Un vino que en los países del Norte y Centro de Europa se toma caliente pero que aquí se bebe de cualquier forma (Jaime lo mezcló con hojas de la flor de Pascua).


Por ejemplo, en un vaso de plástico de Cruzcampo, como hace Pipe, que degusta con estilo el bebedizo, mientras parece estar pensando: "Tonos de caoba, nariz con notas florales y a sotobosque, ligera persistencia en boca y un bouquet excelente, sí señor". 


Javi, a esas alturas ya con la cara borrosa, examina la botella para comprobar sus ingredientes, llevándose la sorpresa de que no aparecen ni la malta ni la cebada por ninguna parte.


Fernando quiso probar el vino de Navidad, largándose un copazo a nuestra salud.


Y Johnny también se sumó a la fiesta, eso sí, tras comprobar que, minutos después de beberlo, Fernando aún seguía en pie.



Como se puede apreciar, todo un derroche de deportividad en las vísperas de la 'Navidad in Blue'. Aprovechamos la ocasión para desear unas felices fiestas y un año 2014 lleno de pádel a todos los millones de amigos de los 'Men in Blue'.


No hay comentarios:

Publicar un comentario